estrategias socioemocionales en el confinamiento

La pandemia del coronavirus ha obligado a confinarnos en nuestros hogares en compañia de nuestros

seres queridos, lo que a primera vista no es tan malo. El problema es que muchas personas no tienen

el mínimo dinero siquiera para solventar las tres comidas diarias, menos servicios públicos ni 

arriendos. Esto genera preocupaciones inmensas, pues deben salir a rebuscarse el alimento,

con el temor de ser sancionados por la policía y lo peor, de ser contagiados y/o contagias a sus seres 

queridos.

El ser humano no tiene la formación, al menos en nuestro contexto, para influir sobre sus emociones,

lo que conlleva a estados y trastornos de ansiedad y depresión. Conllevando a su vez a conductas

desadaptativas y/o maladaptativas como el conflicto y el maltrato intrafamiliar, agresiones

psicologicas, verbales y físicas contra sus parejas e hijos, e inclusive llegando al abuso sexual

infantil. 

Pero el mismo hombre tendría la oportunidad de no incurrir o no dejar avanzar estos comportamiento,

con estrategias que generen bienestar y placer en él y los suyos, el juego, el ejercicio, el yoga, el

bailar, ver películas, estudiar algo de su agrado, la lectura, etc. son actividades que le pueden ayudar

ostensiblemente. Una agenda diaria de actividades llevaba estrictamente seria muy buena estrategia.

El hombre elige sentirse encerrado generando actitudes negativas, o considerar el aislamiento como 

una oportunidad para crecer como persona al lado de los suyos.

El hombre elige, el problema esta en la capacidad para entender la dimensión de su problemática y

tener la suficiente "sabiduria" y habilidad para obrar de la mejor manera. pues lamentablemente no 

se le educa para influir sobre sus emociones, sobre si mismo, sobre su entorno, carece en gran

porcentaje de una inteligencia emocional, social y colectiva.  La mala educación de la que fue objeto

y la cultura reinante se las quedaron debiendo.

Yesid Hernandez